Artículo de Opinión.


El “pormihuevismo” es un movimiento artístico creado por Erik Harley, experto en
estudios urbanos y graduado en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona cuyo
objetivo es denunciar de una forma divulgativa aquella arquitectura especulativa,
corrupta, gentrificadora y salchichera que han padecido la mayoría de nuestros
municipios al ser gobernados por políticos a golpe de testosterona y con escasa visión
del futuro de sus ciudades.


Este movimiento urbano no sólo denuncia la planificación urbanística a golpe de
promotoras y constructores, sino que también denuncia las decisiones que pueden llevar
a cabo determinados municipios a la hora de gestionar e implementar sus políticas
municipales y que estas, afecten a la vida diaria de sus ciudadanos.


El pasado lunes en el último pleno municipal de Benidorm vivimos una situación
“pormihuevista”
. Al amparo de incorporar al debate plenario por vía de urgencia y sin
figurar en la ampliación de la convocatoria (grave error teniendo en cuenta la importancia
de la cuestión a tratar) se sacaron de la chistera la modificación de la ordenanza fiscal
número 1, reguladora del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) donde los parámetros
pasan del 0,667 al 0,82% para los bienes de naturaleza urbana mientras que los de
naturaleza rústica se mantienen al 0,60% y los características especiales al 1,3%.


¿Cómo traducimos estos incrementos a la realidad de Benidorm? Una vivienda media
pasará de pagar 112,74 euros a 191,668 euros
. ¿Y si hablamos de comercios y
establecimientos hoteleros? ¿En qué medida repercutirá esta subida? Ahora mismo un
hotel con capacidad de 200 habitaciones que abona un recibo de 7.979.20 euros pasará
a pagar un recibo de 13.564,64 euros, Si alguien piensa que ese incremento no va a ser
totalmente repercutido en los precios que paga el turista que nos lo explique. De igual
forma, la hostelería pasará de pagar una media de 800 euros a 1400 euros en función
del tamaño del negocio.


¿Alguien en el Ayuntamiento de Benidorm gestionado por el PP no se ha parado a
pensar en cómo puede afectar este incremento a nuestros habitantes?
Desde
Compromís por Benidorm creemos que afectará negativamente en los siguientes
puntos:

  1. Mayor carga fiscal para los ciudadanos: Un aumento significativo en la tasa de
    basura y el IBI significa que los residentes tendrán que destinar más parte de
    sus ingresos para cubrir estos gastos. Esto afectará negativamente a la calidad
    de vida de nuestra población, especialmente a aquellos con ingresos fijos o
    limitados. Una ciudad como Benidorm donde el último año ha subido un 23% el
    precio del alquiler de vivienda o donde el salario medio neto puede rondar los
    1.100 euros. Un incremento de 300 euros de media por vivienda supone un alto
    coste de oportunidad.
  2. Pérdida de poder adquisitivo: Como hemos comentado a medida que los
    impuestos municipales aumentan, el poder adquisitivo de los ciudadanos
    disminuye y afectará a la capacidad de nuestros habitantes para gastar en otros
    bienes y servicios, lo que, a su vez, repercutirá directamente en el gasto
    realizado en nuestra hostelería y comercios.
  3. Reducción de la inversión y el ahorro: Este incremento de los impuestos locales
    provocará que los ciudadanos de Benidorm tengan que reducir las cantidades
    destinadas a inversión y ahorro. Esto puede afectar negativamente el
    crecimiento económico en el largo plazo y al empobrecimiento de la población.
  4. Impacto en la vivienda: Creemos desde Compromís Benidorm que el aumento
    del IBI tendrá un impacto en el mercado de la vivienda. Los propietarios de
    viviendas repercutirán este incremento en los costos de propiedad, lo que puede
    afectar la demanda de viviendas y los precios de la vivienda en la zona. Una
    zona donde escasea la vivienda por la nula gestión realizada por parte del PP y
    ya de por sí con un incremento del 23% en el precio del alquiler de vivienda va
    a provocar tensiones en el mercado inmobiliario incidiendo en la calidad de vida
    de nuestros ciudadanos.
  5. Desincentivo a la inversión empresarial: Los aumentos de impuestos
    municipales también pueden desincentivar la inversión empresarial en el área.
    Las empresas pueden verse afectadas por los mayores costos de operación, lo
    que podría llevar a una disminución de la creación de empleo y la inversión en
    el municipio provocando que empresas y establecimientos dedican establecer
    su negocio en otros municipios donde la presión fiscal sea más baja.
  6. Desplazamiento de población: Si los aumentos de impuestos son significativos,
    algunas personas pueden optar por mudarse a municipios vecinos con
    impuestos más bajos. Esto podría resultar en la pérdida de población en el
    municipio y, por lo tanto, en una reducción de ingresos fiscales a largo plazo.

En resumen, un aumento sustancial en la tasa de basura y el IBI en Benidorm puede
tener efectos negativos en la economía local
, incluyendo una mayor carga fiscal para
los ciudadanos, una reducción del poder adquisitivo, una disminución de la inversión
privada y la inversión empresarial, y la posibilidad de desplazamiento de población. Es
importante que la corporación municipal de Benidorm reconsidere cuidadosamente
estos efectos económicos tomando decisiones de gestión y coordinación de impuestos
que no pongan freno al desarrollo de nuestra sociedad.


¿Se puede hacer? Desde Compromís Benidorm creemos que la calidad de vida de
nuestros ciudadanos no se incrementa a golpe de IBI
, se incrementa dotando de
mayores recursos a partidas sociales que son las que de forma directa inciden en
nuestra vida diaria. Con un compromiso verdadero en solucionar e incrementar la
calidad de vida de nuestros ciudadanos de Benidorm sí se pueden llevar a cabo otras
formas de obtener ingresos por parte del Ayuntamiento de Benidorm y que vienen
además establecidas en la Ley Reguladora de la Bases del Régimen Local Ley 07/1985
del 02 de abril.


Alternativas existen, y las podremos desarrollar en otro momento, pero consideramos
que un gobierno municipal el cual maneja una serie de herramientas e información con
la que desarrollar la política fiscal a largo plazo, debe tener la suficiente capacidad de
gestión para buscar esas alternativas e implantarlas. No necesitamos políticos anclados
en el pasado, necesitamos políticos con amplitud de miras, con visión de futuro y que
de verdad apuesten por el incremento de la calidad de vida de los ciudadanos de
Benidorm
.

Pere Beneyto, Compromís per Benidorm.