La diputada a Corts Marian Campello ha presentado una proposición no de ley para que toda ayuda o subvención pública concedida por la Generalitat Valenciana a establecimientos hoteleros contemple como requisito de acceso que el personal que preste servicios de limpieza en dichos establecimientos esté sujeto al convenio colectivo de la hostelería.

Compromís ha registrado una proposición no de ley para que las ayudas o subvenciones públicas concedidas por la Generalitat Valenciana para el fomento y dinamización del sector turístico valenciano estén subordinadas a los principios de dignidad, seguridad y derechos laborales así como a la inclusión de criterios sociales y de dignificación laborar de un sector fuertemente precarizado cómo es el del personal de limpieza de plantas hoteleras. La iniciativa presentada busca que las Cortes soliciten al Consell que las ayudas en los establecimientos hoteleros contemplen entre sus requisitos de acceso que el personal que preste servicio de limpieza en los establecimientos turísticos interesados esté sujeto al convenio colectivo del hostaleria.

El sector turístico es uno de los que más desigualdades, explotación laboral y economía sumergida presentan, especialmente en los meses de más afluencia de visitantes. En este marco económico, destaca el trabajo de las camareras de pisos, comúnmente llamadas ‘kellys’, que normalmente suponen el 25% de las plantillas de los hoteles. “Son parte de un sector fuertemente feminizado. Sólo en la ciudad de Benidorm se calcula que borde 3.000 mujeres trabajan en este sector y, según un informe de CC.OO realizar al 2016, el 100% de las ‘kellys’ sufren dolores lumbares o muscular fruto del desarrollada y otras afecciones”, ha recordado la diputada Marian Campello.

Dicho estudio, además, destaca que entorno a un 96% de ellas sufre síntomas de ansiedad al afrontar jornadas laborales inhumanas en las que tienen que realizar la limpieza completa de un elevado número de habitaciones. Además, el 71% de las camareras de pisos reconoce que necesita medicarse diariamente para poder afrontar las duras jornadas laborales.

“Es un sector donde encontramos sistemas de contratación muy diversos: desde mujeres que trabajan como fijas o fijas discontinuas, y también observamos otras con variantes contractuales que van desde los contratos por obra o servicio a contratos de año en año. Incluso la Inspección de Trabajo ha encontrado numerosos casos de mujeres que, trabajando para el hotel eran despedidas para volver a ser contratadas a través de una subcontrata, hecho que hace que pierden así los derechos salariales garantizados por el convenio colectivo de la hostelería” ha explicado Campello.  

Según la Inspección de Trabajo, entre enero de 2015 y junio de 2016, los establecimientos hoteleros acumulaban 720.000 euros en multas para utilizar subcontratos de empresas de limpieza o de empresas multiservei hacia de contratar directamente a sus trabajadoras. Las subcontratos con empresas externas de limpieza causa a ‘las kellys’ un recorte de aproximadamente 300 euros mensuales del sueldo reconocido por el convenio colectivo de la hostelería, que está borde los 1.300 euros sucios mensuales. En el caso de las empresas multiservei, al estar fuera de todo convenio colectivo concreto, se detectan casos en los que los salarios no llegan al mínimo interprofesional, el que supone por las trabajadoras cobrar una media de 1,5 euros por habitación finalizada.

(fuente: Compromís Corts Valencianes)