El pasado mes de agosto diferentes miembros de Compromís Los Verdes realizaron una ruta de denuncia de la suciedad acumulada en los alrededores del parque natural Serrada Helada, en el término de Benidorm. En ese momento, se puso de manifiesto la existencia de desechos que, además de crear un impacto paisajístico a los caminantes y visitantes, podía suponer un impacto medioambiental y ecológico de la zona. A finales de diciembre, el Ayuntamiento de Benidorm procedió a su limpieza y el pasado sábado el portavoz del grupo municipal, Josep Bigorra, con los secretarios de Compromís per Benidorm de Organización, José Daniel Ibáñez, y de Jóvenes, Pep Pérez Soriano , comprobaron los trabajos realizados in situ.
«Después de nuestra denuncia, hemos podido comprobar que la mayoría de residuos han sido eliminados de los caminos, parajes y barrancos donde antes había muebles abandonados, televisores o restos de construcción entre otros. Pero todavía quedan residuos en puntos no tanto accesibles y que también pusimos en conocimiento del Ayuntamiento y de los que volvemos a pedir que se retiren», explicó Bigorra. El portavoz instó a terminar la tarea de limpieza en cumplimiento a la Ordenanza Municipal de Medio Ambiente, que señala que el Ayuntamiento debe retirar estos residuos dañinos, en caso de que se encuentran en vía o terreno público, e imponer sanciones a aquellos propietarios que los tiren incontroladamente.
Por otra parte, la única placa de prohibición de tirar basura y residuos, de acuerdo con la ordenanza municipal, continúa escondida detrás de la vegetación que ha crecido sin ningún control. El portavoz del grupo municipal ha recordado que ya en agosto se solicitó que estas placas informativas fueran totalmente visibles y que, además, se incrementaran las señales informativas en la zona. «Meses después de ponerlo en conocimiento al Ayuntamiento y después de la actuación municipal, no se ha hecho ni lo uno ni lo otro en este sentido», ha criticado.
Asimismo, Bigorra ha vuelto a solicitar que el Ayuntamiento aumente la vigilancia de la policía rural en la zona para controlar que estas situaciones no vuelvan a pasar y ha hecho un llamamiento a los vecinos y vecinas de la zona a que sean respetuosos con el medio ambiente. «Durante el pasado sábado encontramos nuevos restos de poda, vertidos de forma incontrolada y eso tenemos que intentar evitarlo», señaló.
