El Ayuntamiento de Benidorm autorizó vía decreto que personas externas a la administración pudieran impartir diferentes cursos en el ‘Palau d’Esports L’Illa’ de Benidorm. El concejal de Compromís y portavoz de Compromís Los Verdes, Josep Bigorra, ha criticado en rueda de prensa que el gobierno local está permitiendo «una contratación encubierta» sin cumplir ni los horarios autorizados, ni las salas permitidas y, por tanto, permitiendo que la Ayuntamiento cobre mucho menos por el uso de las instalaciones municipales deportivas de todos y de todas.
«Pedimos explicaciones y responsabilidades al Departamento de Deportes del Ayuntamiento de Benidorm porque está haciendo la vista gorda y promocionando las clases que realiza una persona particular en el Palau, sin cumplir ni los horarios ni las aulas por las que fue autorizado, y por las que Benidorm está perdiendo dinero», señaló Bigorra.
El portavoz se refiere así a que el pasado 7 de diciembre se hicieron tres autorizaciones para realizar cursos en el ‘Palau d’Esports’: uno de zumba, uno de pilates y otro de gimnasia. Las tres autorizaciones válidas por un mes y renovables mes a mes tenían unos horarios y salas concretas permitidas y tenían que pagar una cuota al Ayuntamiento, de acuerdo con la ordenanza municipal.
En el caso de los cursos de gimnasia autorizados, correspondientes a ejercicios de cardio y musculación según la propia concejala de Deportes, el decreto sólo permitía el uso del gimnasio de lunes a viernes de 10 a 12 horas y de 17 a 19 horas. Pero este autorizado está anunciando con un cartel que está colgado en el propio Palau que da clases no sólo de gimnasio, sino también zumba, pilates (cursos autorizados a otros autónomos), piscina, yoga o aquagym de 8 a 21 horas de lunes a sábado y de 10 a 13.30 los domingos «incumpliendo flagrantemente la autorización del Ayuntamiento, ya que está aumentando las horas de los cursos de 88 autorizados a 350 horas al mes y está empleando espacios no permitidos, como la piscina».
Bigorra explicó que este hecho tiene consecuencias a nivel de recaudación del Ayuntamiento: «Si cumpliera el decreto, para la sala de musculación o de cardio debería pagar 1.868,24 euros por cada una al mes, o 3.736,48 en total, pero en cambio, con las horas que hace, y contando únicamente las tasas del gimnasio, debería abonar al Ayuntamiento como mínimo 7.430,5 euros por sala o 14.861 en total. Es decir, estamos perdiendo dinero». Además, ha añadido que, con las cifras del servicio real, «podríamos estar hablando de una contratación menor encubierta que se ha saltado pedir diferentes presupuestos, sólo para beneficiar claramente unos particulares».
El portavoz asegura que el Ayuntamiento es consciente de estas irregularidades, «porque en el mismo Palau, al preguntar por los precios de los cursos que ofrece el Ayuntamiento, nos informan de los precios y horarios de este curso autorizado y nos señalan que es más barato que los que ofrece el consistorio con los monitores deportivos municipales». Unos monitores que ya tienen horarios y funciones en el gimnasio, de acuerdo con los informes emitidos por el Ayuntamiento antes de rescindir la concesión privada del Palau.
En definitiva, Bigorra cree que el gobierno local «debe explicar por qué permite que un particular ofrezca cursos saltándose las condiciones autorizadas, pagando menos a las arcas municipales, posibilitando que haga competencia maliciosa a los servicios públicos que da el Ayuntamiento con los monitores deportivos municipales, y además haciendo publicidad de estos cursos autorizados, lo que repercute en la disminución de posibles abonados en los servicios adscritos al Ayuntamiento». «El único beneficio que hay aquí es el privado y quizás efectuado de forma interesada por el gobierno local para hacer ver de forma intencionada que la privatización del servicio es la mejor opción», ha finalizado advirtiendo Bigorra.
Audio de la rueda de prensa: